miércoles, 14 de octubre de 2015

Crítica de película: El intercambio.

Changeling | Director: Clint Eastwood | Cast: Angelina Jolie y John Malkovich | País: USA | 2008 | Basada en hechos reales.

Trailer aquí.

     

Los Angeles,1928. Christine Collins (Angelina Jolie) es una madre soltera cuyo hijo desaparece sin dejar rastro. Algunos meses después, la policía le comunica que ha encontrado al niño, pero, nada más verlo, Christine se da cuenta de que no es su hijo. Sin embargo, está tan confundida que se lo lleva a casa, aunque exige que continúe la búsqueda de su verdadero hijo. Tachada de loca e incapacitada por la policía, por fin encuentra un aliado en el reverendo Briegleb (John Malkovich), que la ayudará en su lucha.



Los Ángeles, 1928. Las denuncias de desapariciones de niños empiezan a asustar a la gente y las personas empiezan a poner presión sobre la policía que no tiene ninguna respuesta.
En ese escenario es secuestrado Walter, el pequeño hijo de 9 años de nuestra protagonista. Christine Collins al descubrir que su pequeño ha desaparecido hace lo que cualquiera de nosotros haría, denunciar a la policía, pero es ignorada y como toda madre desesperada se niega a resignarse a la ausencia de Walter.
Cinco meses después, la policía (que ya tiene la soga al cuello por la presión pública) la llama para darle la gran noticia, han encontrado a Walter y ella debe ir a buscarlo. Y va a su encuentro, pero hay un problema, a pesar de lo que la policía la quiere obligar a pensar, ese niño no es su hijo.
Viviendo con un sustituto de Walter e intentando demostrar por todos los medios que ese niño no es su hijo y que su verdadero niño era todavía ahí afuera, cuando la gente que los conoce empieza a darse cuenta que ese niño definitivamente no es Walter, la policía sabe que debe hacer algo o empezaran a cortar cabezas.
¿Cuál es la mejor opción para esa policía corrupta? Hacer pasar a Christine por loca y encerrarla en un psiquiátrico, donde es drogada, torturada y maltratada para que diga lo que quieren que diga, pero ella a pesar de todo lo que sufre se niega porque sabe que darle la razón a la policía sería despedirse de cualquier esperanza de ver de nuevo a Walter.
Contra viento y marea esta madre que ha sufrido todo lo que puede padecer un ser humano no baja los brazos y seguirá con la frente en alto y con una ilusión firme de volver a abrazar a su hijo.
Cuando tras varios sucesos encuentran a un hombre que pasaba su tiempo libre asesinando niños con un hacha en un granero, el mundo de Christine vuelve a sacudirse, le dicen que su hijo fue asesinado pero su cadáver no está en ningún lado. Pero hay niños que huyeron y Christine se aferra a la esperanza de que su hijo sigue vivo, huyendo y con miedo, pero vivo.
Uno de los asesinos seriales más notables de la historia americana, Gordon S. Northcott secuestró, torturó, abusó, asesinó y descuartizó a más de veinticuatro menores de doce años con ayuda de su madre y de su pequeño sobrino a quien maltrataba física, psicológica y sexualmente.

¿Qué me gusto?

Angelina Jolie me demostró de una vez y para siempre porque llegó a ser la actriz mejor paga de Hollywood, es sencillamente maravillosa su actuación. Con nominaciones a mejor actriz al Oscar, BAFTA y globo de oro, esta película es (En mi opinión) la mejor obra de esta hermosa mujer. Yo siempre admiré profundamente a Angelina por su labor filantrópico en el mundo, pero como actriz nunca había visto una película suya que me enamorara, pero cuando vi este film me quite el sombrero. Una actuación sublime, conmovedora y que traspasa la pantalla con todas las emociones que transmite no solo ella sino el fantasma de Christine Collins, esa madre que soporto todo con tal de no renunciar a su hijo.

Es una historia muy oscura, siniestra y perversa pero contada de una manera muy limpia, no se centra en el morbo pederasta o sangriento de los niños siendo masacrados y abusados, sino en la lucha de Christine y en su voluntad inquebrantable. Siendo contada explícitamente esta historia le erizaría el pelo de la nuca hasta al director del exorcista, pero Clint Eastwood (que demuestra porque su nombre sigue resonando año a año) lo dirigió de una manera que si bien es shockeante no llega a ser desagradable de ver. 

Podría ser la mejor película de terror pero, para mi suerte, no está ni cerca de ese género. Es un biopic dramático y algo escalofriante pero que no asusta, más bien te deja con una sensación de indignación profunda por Christine y todo por lo que tuvo que pasar y también una sensación de conformidad cuando Gordon es sentenciado a la horca.

Un ritmo perfecto, a veces las películas biográficas o basadas en hechos reales pecan de pesadas o que caen en la casilla de documental y no en la adrenalina que genera una buena película. Pero El intercambio es una de los mejores biopics que he visto en mi vida, junto con La lista de Schindler.

Una estética lograda hasta en la última toma, inclusive la apariencia del asesino es impresionantemente similar al real.

Las películas basadas en hechos reales tienen un gran condimento y es que las vemos con más emoción, porque sabemos que no salió de un guión, sabemos que cada tortura y grito de Angelina Jolie en pantalla es un dolor agonizante que sufrió una mujer real que luchaba por volver a ver a su hijo y que realmente en 1930 hubo un hombre que murió en la horca por arrancarles la vida poco a poco a niños indefensos. Llegó un punto en que cada vez que Angelina lloraba yo lloraba porque sabía que Christine lo había llorado.


¿ Qué no me gusto?

Las críticas dudosas que recibió, una obra magnífica tanto de dirección, ambientación y actuación no solo de Angelina si no de todo un elenco que prestó su piel para estos personajes que se quedan en la memoria. Me molesta que no recibiera el reconocimiento que merece semejante obra.



¿En conclusión?

Sencillamente magnífica, una de esas películas que cualquier cinéfilo (o cualquier persona que quiera disfrutar de unas bien aprovechadas horas) va a disfrutar sin ninguna duda.


1 comentario:

  1. ¡Hola!

    Creo que era un poco pequeña cuando la vi, tenía nueve años y fui al cine y me aburrí un poco, aunque había partes oscuras que ponían la piel de punta, en general el tono tan lento que tenía me aburrió. Ahora si lo pienso no creo que fuera una mala película, simplemente creo que debería haberla visto más adelante. Seguramente lo haga en el futuro.

    Gracias por la reseña, ¡besos!

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